miércoles, mayo 31, 2006

Por Amor

Nuestro Dios y nuestro rey,
¡qué grande eres en toda la tierra!
¡Tu grandeza está por encima de los cielos más altos!
Con las primeras palabras de los niños más pequeños,
y con los cantos de los niños mayores
has construido una fortaleza por causa de tus enemigos.
¡Así has hecho callar a tus enemigos que buscan venganza!
Cuando contemplo el cielo,
y la luna y las estrellas
que tú mismo hiciste no puedo menos que pensar:
"¿Qué somos los mortales para que pienses en nosotros
y nos tomes en cuenta?"
¡Nos creaste casi igual a ti!
Nos trataste como a reyes;
nos diste plena autoridad sobre todo lo que hiciste;
nos diste dominio sobre toda tu creación:
sobre ovejas y vacas,
sobre animales salvajes,
sobre aves y peces,
¡sobre todo lo que se mueve en lo profundo del mar!
Nuestro Dios y nuestro rey,
¡qué grande eres en toda la tierra!
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Este himno David lo cantaba con la melodía que se toca cuando se exprimen las uvas, en agradeciemiento por el fruto de la tierra. Destaca que la mejor arma es la comunicación con Dios y esta se manifiesta en los niños.
Apesar de ser nada el nos regaló primero que nadie la luna y las estrellas. Nos hizo semejantes a Él y nos sento en el trono de la creación. Cuando veas pajaritos volar, es un regalo para tí; cuando veas peces nadar, es un regalo para tí; cuando veas animales galopar y saltar en los campos, es un regalo mas que nuestro Rey nos entrega Por Amor.

martes, mayo 02, 2006

Con La Persona (2ª parte)


Seis días antes de que se celebrara la fiesta de la Pascua, Jesús fue al pueblo de Betania. Allí vivía Lázaro, el hombre a quien Jesús había resucitado.
En ese pueblo, unos amigos de Jesús hicieron una cena para él. Lázaro estaba sentado a la mesa con Jesús, y su hermana Marta servía la comida. María, su otra hermana, tomó una botella de un perfume muy caro y perfumó los pies de Jesús. Después los secó con sus cabellos, y toda la casa se llenó con el olor del perfume.Pero uno de los discípulos, llamado Judas Iscariote, el que después traicionaría a Jesús, dijo:
--¿Por qué no se vendió este perfume? Nos habrían dado el dinero de trescientos días de trabajo, y con él podríamos haber ayudado a los pobres.
Entonces Jesús le dijo a Judas:
--¡Déjala tranquila! Ella estaba guardando ese perfume para el día de mi entierro. En cuanto a los pobres, siempre los tendrán cerca de ustedes, pero a mí no siempre me tendrán.
En realidad, a Judas no le importaban los pobres; dijo eso porque era un ladrón. Como él era el encargado de cuidar el dinero de Jesús y de los discípulos, a veces se lo robaba.
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María no solo adoró a Jesús por que habia resucitado a su hermano, si no que lo hizo por que sabia que Él moriría por amor a ella.
No solo era un perfume muy caro, era todo un año de trabajo, tanto se perdió, pero ella queria dar lo máximo que podía e incluso sus cabellos no bastaban como toalla.
¿De que vale la caridad si aun no se ha estado a los pies de Jesús?
¿Como se podra amar a los pobres si no hemos conocido, compartido, escuchado y adorado a Él quien es el Amor.

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¡Dejenme tranquilo ahi! en el mejor lugar que puedo estar, a sus pies.